728 x 90

La Defensoría del Pueblo condena linchamiento en Ivirgarzama

  • 2024-05-09
img
Dos de los tres acusados de robo en Ivirgarzama. Foto: RRSS

Tras la captura y golpiza que propinaron pobladores de Ivirgarzama, en el trópico cochabambino, a tres presuntos ladrones, la Defensoría del Pueblo condenó la violencia y exigió celeridad en las investigaciones.

Mediante un comunicado, la entidad informó que preliminarmente se conoce que tres personas perdieron la vida a manos de la turba.

“La Defensoría del Pueblo, a través de la Delegación Defensorial Departamental de Cochabamba, condena enérgicamente la violencia mediante la cual un grupo de personas movilizadas de la región de Ivirgarzama del municipio de Puerto Villarroel; procedió a ingresar a las celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) para retirar a tres personas que se encontraban privadas de su libertad por una investigación penal”, se lee en la nota.

Asimismo, indica que producto de este hecho se conoce de forma preliminar que las tres personas habrían perdido la vida; por lo que pide a las autoridades competentes investigar los hechos y establecer responsabilidades.

Ivirgarzama

La institución exhorta, además, a las autoridades del municipio de Puerto Villaroel y a todas las instancias llamadas por ley a escuchar y atender las denuncias con la “debida diligencia” y activar acciones inmediatas.

“La Defensoría del Pueblo reitera su compromiso con la defensa de los derechos humanos y la promoción de una cultura de paz y respeto a la ley. Reiteramos nuestro enérgico rechazo a la violencia en todas sus formas”, acota la nota.

Este miércoles tres hombres fueron sacados de celdas policiales en Ivirgarzama y golpeados y quemados por una turba de pobladores; que los acusa de robos y secuestros.

En videos que circulan en redes sociales se ve a los tres hombres desnudos y siendo golpeados por los pobladores. Preliminarmente se conoce que al menos uno de ellos falleció producto de las lesiones. La Policía aún no emitió un informe oficial. // Fuente: La Razón