Excesiva confianza. Error
procedimental. Dos policías en la mira. Christian Emilio Gosen y su esposa
fueron hallados muertos en un centro de hemodiálisis. El llamado “falso médico”
se quitó la vida, y la de su esposa, con un arma de fuego. ¿Qué sucedió el
martes 7 en la noche?
Las investigaciones
preliminares, dadas a conocer por el comandante departamental de Santa Cruz,
Érick Holguín, indican que el chileno, apuntado por medio centenar de víctimas
de ejercer la medicina sin título que lo avale y de dejarles secuelas, padecía
una enfermedad renal.
Por ello, asistía tres veces a
la semana a un centro de hemodiálisis de la capital oriental, por lo cual
gozaba de un permiso judicial para abandonar la penitenciaría de Palmasola, con
dos policías que lo vigilaban. En ninguna de sus salidas tuvo un comportamiento
sospechoso.
Eso permitió que se ganase la
confianza de sus custodios, por lo cual incluso podía encontrarse con su
pareja, Betsabé Choque. Ella igual era investigada en el caso abierto por la
Fiscalía, por uso de instrumento falsificado, ejercicio ilegal de la profesión
y falsedad material e ideológica.
‘Falso
médico’
El martes en la noche, Gosen
salió de la cárcel para su tratamiento. El falso gastroenterólogo se encontró
con Choque en el centro de salud. Según las pesquisas, los policías a cargo de
su cuidado no requisaron a la mujer, quien esa jornada había llevado un arma de
fuego a la cita.
“Es un error procedimental,
toda vez que quien vaya a tener contacto con un privado (de libertad), así sea
para un estudio médico o diálisis, tendría que ser requisado para evitar que se
produzca cualquier tipo de hecho”, remarcó el comandante Holguín, en
conferencia de prensa.
Así, con el arma a disposición
de Gosen y tras la finalización de la hemodiálisis, la pareja solicitó ir al
baño. Y de repente se escucharon dos disparos. De acuerdo con las pesquisas, el
“falso médico” disparó a Choque y posteriormente se quitó la vida. Un homicidio
y un suicidio.
Se intentó salvar a la esposa
malherida, pero murió camino a un hospital. “Se han encontrado proyectiles en
el suelo, una caja con las municiones que habría llevado la mujer (…) y quien
dispara dos veces fue el ciudadano chileno, primero a su esposa y luego él
quitándose la vida”.
Ahora, los policías que
acompañaban a Gosen están en aprietos. “Se les pedirá los informes
correspondientes. Se abrirá un proceso administrativo para establecer
responsabilidades en el no cumplimiento de su trabajo”, subrayó Holguín. De
esta forma, las indagaciones continúan.
El 26 de abril, el “falso
médico” era enviado a Palmasola. Once jornadas después, terminó con su vida.
Las justicias de Chile y de Brasil también lo buscaban. En Bolivia, se lo
acusaba del fallecimiento de dos de sus pacientes estafados. Y al parecer, su
caso quedará archivado. // Fuente: La Razón